Sobre Nosotros

Nuestra Visión

Localizados en la ciudad de Santiago sede de gobierno, deseamos ser instrumentos de Dios para ayudarle a cumplir el sueño que Dios tiene para ti.

Nuestro sueño, abrir iglesias en todo Chile.

Buscamos la abundante diversidad formada por personas de diversos orígenes armoniosamente unidos en la verdad.

Estamos comprometidos plenamente en cumplir la gran comisión de predicar el amor y la esperanza qué hay en Jesucristo. Como verdaderos discípulos de Jesús, no sólo escuchamos la Palabra de Dios, sino que también seguimos las huellas de Cristo al alimentar a las ovejas perdidas y morir para que muchos otros puedan vivir en Cristo. Nuestro propósito es difundir las buenas nuevas del Evangelio al mundo, al vecindario y la calle. Estamos continuamente creciendo y planificando abrir nuevos sitios en nuestra ciudad. Creemos que para compartir la alegría de la salvación que viene a través de Jesucristo, debemos considerar el método más estratégico para llegar a cientos y miles de personas. La plantación de iglesias permite a nuestra congregación poner en práctica la Palabra y llegar a las masas con el mensaje del Evangelio.

Declaración de Fe

Creemos…

En las Sagradas Escrituras tal y como fueron originalmente dadas por Dios, divinamente inspiradas, infalibles, enteramente dignas de confianza; Y como la autoridad suprema en todos los asuntos de fe y conducta …

En un Dios, eternamente existente en tres personas, Dios Padre, Dios Hijo y Dios Espíritu Santo …

En nuestro Señor Jesucristo como Dios manifestado en la carne, Su nacimiento virginal, Su vida humana sin pecado, Sus milagros divinos, Su muerte vicaria y expiatoria, Su resurrección corporal, Su ascensión, Su obra mediadora y Su regreso personal en poder y gloria. ..

Creemos en la salvación del hombre perdido y pecador a través de la sangre derramada del Señor Jesucristo en la Cruz del calvario y en su poderosa resurrección.

Creemos que la salvación es por la fe aparte de las obras, y en regeneración por el Espíritu Santo.

En el Espíritu Santo, por cuya morada en el corazón del creyente lo capacita para vivir una vida santa, para testificar y trabajar por el Señor Jesucristo.

Creemos en la unidad de todos los verdaderos creyentes, quienes son la verdadera Iglesia, y Cuerpo de Cristo.

En la resurrección de los salvos y de los perdidos; Los que son salvos para la resurrección de la vida, y los que están perdidos para la resurrección de condenación.